ESPECTACULOS

HISTORIA O LEYENDA.

A MANERA DE EDITORIAL.
(PRIMERA PARTE)
Rodolfo Popoca Perches


Historia o Leyenda, ¿cómo podríamos nombrar al relato que pretende recapitular los hechos que han dado vida al rock?, no sé si es un asunto de la historia, o en todo caso caiga en el terreno de la leyenda, no sé cómo llamarle, así que he optado por  dejarlo así, como una doble opción, además, esta situación me permite recordar el disco “Storia o Leggenda” que el grupo de rock progresivo italiano Le Orme (Las Huellas) publicó en 1977. El álbum en cuestión me sugirió la idea de ofrecer mi propia visión respecto a este asunto tan serio en que se  ha  convertido el rock. Hablar de los sucesos, de los protagonistas, de los grandes festivales, de los discos más revolucionarios, del diseño de las portadas, de los grandes virtuosos, en fin, de todo lo que encierra  en su amplio contenido la palabra rock, llega con frecuencia a confundirnos y ya no sabemos si estamos hablando de historia o de una leyenda, de esas que se van contando de generación en generación basadas en un hecho real que con sus añadidos, supresiones y modificaciones intenta hacerse pasar por verdadera.
La idea es presentar, en varias entregas, una visión más o menos cronológica de los acontecimientos como yo los viví y como yo los entiendo, y digo más o menos para no comprometerme con la exactitud y rigidez del recuento de los hechos, finalmente la historia es algo más que la acumulación de fechas y el listado de héroes y villanos; es, entre otras cosas, el análisis de los hechos y de qué manera ha influido en los diferentes ámbitos de la vida, además del obvio que es el musical, está el ideológico, el cultural, el literario, el político y muchos más. Por otra parte, quiero personalizar este relato, por eso digo que los acontecimientos son de acuerdo a mi visión, como yo los viví y como yo los entiendo, para no tener que sujetarme a la rigidez de la historia como ciencia, total, es mi experiencia y ahí, parafraseando Ortega y Gasset, “soy yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella, no me salvo yo”
Me dispongo a hablar entonces, de una de las bandas sonoras de mi vida, porque debo reconocer que no es la única, si el rock es mi soundtrack, entonces el blues está necesariamente involucrado, pero de ninguna manera podría descartar a la música clásica y el jazz, estos lenguajes también han musicalizado mi vida, han marcado, en grandes o menores proporciones, cada uno de mis días.
Pues sí, podría ser tal vez una leyenda, porque una leyenda está generalmente basada en una persona, una comunidad, un momento, un acontecimiento. La leyenda parte de un hecho histórico, pero desde el punto de partida, se van desarrollando una serie de episodios imaginativos, diríamos  en términos de música que la leyenda son variaciones sobre un tema original. Como todas las leyendas, esta también tiene sus héroes y villanos, tiene sus epopeyas, esas grandes narraciones que nos hablan de las acciones trascendentales, dignas de ser guardadas celosamente en la memoria colectiva de un pueblo, de una civilización, y que giran en torno a la figura de un héroe, si no es así, ¿de qué otra manera podríamos explicarnos los hechos (historia o leyenda) que rodean las vidas de personajes como Jim Morrison, Janis Joplin, John Lennon, Jimi Hendrix, Elvis Presley, Freddie Mercury, Bob Hite The Bear, Kurt Cobain, Keith Moon, John Bonham, y todos aquellos que con su prematura muerte, ayudaron a engrandecer el mito? Esta historia, o leyenda si lo prefieres, queda en la memoria colectiva de todos aquellos que vivimos al ritmo del rock, de todos los que sabemos, porque nos consta, que el “beat” es algo más que nuestro ritmo cardiaco. Esta leyenda, o historia si lo prefieres, es un verdadero sazonador de nuestros días, de nuestros a veces, solo a veces, desabridos y descoloridos días, así que a través de estas líneas que entregaremos periódicamente iremos adentrándonos en la magia de la leyenda a partir de hechos históricos que han marcado uno de los fenómenos sociales, culturales, ideológicos y, evidentemente, musicales.
 Mi intención es presentar una serie de episodios ordenados más o menos en una sucesión cronológica, permitiéndome, de vez en cuando, algún salto, presentar algunas regresiones o progresiones, según las necesidades del relato.
Insisto, mi visión no es la del historiador analítico que con fría exactitud recuenta los hechos, calcula las consecuencias de los mismos y pronostica un desenlace final; tampoco es la del contador de historias que adereza  sus narraciones con episodios salpicados de fértil imaginación presentando los hechos con altas dosis de verosimilitud. No, ni una cosa ni la otra, sólo intento compartir contigo, amable lector, mi propio ángulo, mi visión, cómo vivo las cosas desde mi posición, como entiendo el rock y lo que este ha  significado para mí. La historia se ha contado mil veces, realmente queda poco por decir, aunque esta es una historia siempre inconclusa, porque se sigue y se sigue, y se sigue escribiendo y así, no sé hasta cuando...
Yo, como todas las personas que nos gusta el rock, lo viví, como dijera Paul Anka, a mi manera, porque cada canción es un momento de mi vida, y de la vida de quien la escucha, y seguramente, una misma canción, tendrá diferentes significados para cada persona, dependiendo de su contexto geográfico, social, cultural, cronológico, en fin, hay una serie de variantes que modifican completamente el sabor de una misma melodía. Cuando escucho, por ejemplo, la canción Helpless del disco DEJA VU de Crosby, Stills, Nash & Young, se me vienen a la mente una especie de avalancha de recuerdos, incluidos olores y sabores que en el momento que escuché la canción por primera vez, estaban seguramente ahí presentes. Así, cada vez que escucho Helpless recuerdo el calor de finales de junio, con esa sensación de alivio y ligereza que representa terminar un ciclo escolar, ver hacia adelante dos largos meses de vacaciones sin tener muy claro lo que voy a hacer. Huele a césped húmedo recién cortado, es junio, terminé un nuevo ciclo escolar y me fui limpio, sin materias reprobadas, cosa rara, debo decirlo, así que sin tener que pensar en preparar exámenes extraordinarios veo sesenta días completamente relajados, mañanas de  canchas de tenis y tardes de ajedrez y en el tornamesa sonando Helpless de Crosby, Stills, Nash and Young mientras volteo la portada del disco viendo detenidamente los créditos, analizando la fotografía del cuarteto de músicos y sintiendo nostalgia por esa época que no viví, ¿cómo se llama a ese sentimiento de extrañar lo que nunca se tuvo? No me acuerdo, pero eso es exactamente lo que siento. Son los últimos años setentas, posiblemente el 79, tengo 16 años y veo la fecha del disco, marzo de 1970, casi después de 10 años descubro esta joyita musical que no me canso de escuchar, creo que la canción de Helpless la escuché en Radio Uva, cuando esta estación era más propositiva y transmitía buenas rolitas en inglés. Ahí escuche algunas de las primera canciones que marcaron mi vida para siempre, Seasons in the Sun de Terry Jacks, Why we said goodbye? de Dave Mc Clean, Philosopher de Yellow Stone and Voice, The Night Chicago Died de Paper Lace, Saturday Night de Bay City Rollers, Band on the Run de Paul Mc Cartney, Goodbye Yellow Brick Roads de Elton John...en fin, no es el objetivo de la presente entrega repasar todas esas canciones que significaron la primera banda sonora de mi vida. Pero eso sí, todas aquellas canciones que para mi significaron algo en mi vida, todavía ahora, después de 20 o 25 años, las sigo escuchando, todavía me producen aquellas mismas sensaciones, además de la evidente nostalgia de tiempos ya idos, y de eso, además de otras cosas, es de lo que me siento profundamente orgulloso, sigo escuchando la misma música que tuvo significado para mí en mi primera juventud. Qué triste para quienes, siendo jóvenes, se alucinaban escuchando a los Back Street Boys o a 'N Sync, o a New Kids on the Block, ahora quien sabe que escucharan, porque seguramente esa música ya no significa nada para ellos, porque de hecho esa música no significa nada para nadie, al menos para nadie que tenga dos dedos de frente. Yo no entiendo porqué los jóvenes compran chatarra, y no solamente en música, sino en todo, leen chatarra, comen chatarra, ven televisión chatarra, escuchan chatarra, suelen relacionarse con personas chatarra, eso sí, muchos de ellos no manejan chatarra, papi les compra buenos carros con un súper estéreo en el que escuchan música chatarra, pero es como si ser joven fuera sinónimo de llevar una vida chatarra que en el mejor de los casos, terminaran por aburrirse de ella y cambiar su cuestionable jerarquía de valores, entonces sucede que cuando cumplen 30 años y escuchan una canción de...de quién será...mmm...podría ser, por ejemplo, se me ocurre pensar en Milli Vanillie que durante los años ochentas, cuando yo era joven, tuvieron sus momentos de gloria, aunque me siento comprometido a decir que a mi ellos nunca me gustaron, pero después todos nos dimos cuenta que ellos no cantaban, sólo hacían playback, pues sí, se descubrió el fraude. Qué pena para los fans de este dueto alemán, que significará para quienes durante mediados de los años ochentas compraron sus discos, y los defendían hasta con las uñas. Seguramente eso sucederá con quienes en estos tiempos escuchan a Lady Gaga  o no sé que otros artistas perecederos cuya fecha de caducidad no trasciende los dos años de vida, muy poco para la música.
Aquellas primeras canciones que escuché han marcado mi vida y hasta la fecha sigo escuchándolas y siguen significando lo mismo para mí que hace 20 o 25 años. Recuerdo que por aquellos años conocí a Supertramp, a The Who, a Pink Floyd, a Yes, a Genesis, y a otros grupos que era imposible escucharlos en la radio, grupos italianos como Le Orme o Premiata, y algunos ingleses menos favorecidos por los medios de comunicación comerciales como Emerson, Lake & Palmer, Camel o King Crimson, en serio, yo tenía 15  o 16 años y ya escuchaba discos como In The Court of the Crimson King de King Crimson, Tarkus de Emerson, Lake & Palmer, Snow Goose de Camel, The Dark Side of the Moon de Pink Floyd, Quadrophenia de The Who, uno de los discos que más me han marcado, o Breakfast in America de Supertramp, en fin, ya habrá oportunidad de hablar de esos discos que sedujeron por completo mi atención musical.
La música es, entonces, parte importante de mi vida, estoy convencido de aquella frase dictada por el filólogo y filósofo alemán Friedrich Wilhelm Nietzsche: “La vida sin música, sería un error”.
Te espero en mi próxima colaboración para que me permitas seguir compartiendo contigo mis experiencias personales vividas al trepidante ritmo del rock. Hasta entonces...



 

 

CON GRAN EXITO TERMINÓ EL XIV FESTIVAL AGUAS-BLUES

 Por: Liam Adrian.
En punto de las 5 de la tarde, el Teatro Aguascalientes abrió sus puertas para que el público conocedor de buena música se diera cita, a escuchar de XIV Festival Internacional Aguas-Blues que contó con las agrupaciones de TRAVELING SALVATION BLUES BAND  (Aguascalientes),TEN CON TEN BB  (D.F.), NARANJITO BLUES  (Guadalajara), KOSMIK RAIN  (D.F.) ,-quien fue quien se robo la noche con la gran voz de Jimena Segovia al frente de esta banda, KOSMIC RAIN dio una gran muestra de lo que es tocar y cantar en serio el blues- LA RAMBLA  (D.F.) y JIMMY MAMOU  (E.U.A.).
Claro que no podía faltar el prietito en el arroz, cuando la banda La Rambla deleitaba a los asistentes que abarrotaron las localidades del teatro, un espontaneo se aferraba a a subir al escenario a tocar su armónica con la banda, pero por más que la seguridad del coso no se lo permitía, una y otra vez el seguía insistiendo, hasta que los de la banda accedieron a que tocara con ellos. También cabe recalcar, que cuando tocó el turno al gran músico Jimmy Mamou, quien fuera guitarrista de la gran leyenda del Rock N Roll Little Richards, mucha gente abandonó sus asientos, retirándose, desconociendo completamente la gran figura que estaba en ese momento en el escenario, desafortunadamente es gente no conocedora del buen Blues, que solamente va a este tipo de eventos porque es gratuito. ¡Felicidades! a los organizadores por este muy buen evento, esperemos que el Festival se siga realizando año con año y siga creciendo como hasta hoy lo han venido haciendo.